Mujer asesinada en Bogotá con polvo tóxico ya había denunciado dos veces a su atacante
La vida de Maryori Muñoz Sánchez se acabó sobre las 7:37 de la noche del miércoles 15 de marzo en manos de su expareja, Luis Carlos Aguirre, de 68 años.
El día de Maryori comenzó como es habitual: fue a trabajar en el local del piso 11 denominado ‘Centro Estético Matiz, Salud y Belleza’, de la torre médica del centro comercial Mayorca, ubicado en el área metropolitana de Medellín.
Aguirre llamó a la puerta, preguntó por ella, a lo que la víctima salió a hablar con él.
Minutos más tarde, ingresó al consultorio pidiéndole ayuda a su compañera porque “no podía ver”. Al parecer, tenía las córneas bastante dañadas.
En ese momento, Aguirre le arrojó el polvo en la cara y salió corriendo. Cianuro fue la sustancia letal que ella inhaló.
Maryori se desplomó en el piso 11 y fue atendida de inmediato por personal médico; esas personas también sufrieron afectaciones por el polvo. Mientras tanto, Aguirre salió corriendo, pero murió en el baño del piso 3 del edificio.
Aunque Maryori fue llevada a la clínica, falleció.
Ya había denuncias
El secretario de seguridad de Sabaneta, Mariano Atehortúa, informó sobre el pasado de esta expareja que atravesaba por dos procesos de violencia intrafamiliar: uno ante Ficalía y uno administrativo de restablecimiento de derechos ante Comisaría de Familia.
“Sabemos que existía una denuncia en la Fiscalía General de la Nación por violencia intrafamiliar y en la Comisaría de Familia se venía haciendo el proceso administrativo para el restablecimiento de los derechos de esta mujer que venía siendo violentada de manera física y verbal por el compañero permanente”, indicó el secretario.
De acuerdo con la información de las autoridades, Aguirre continuaba buscándola, por lo que Muñoz decidió cambiar de residencia. Se trasladó del municipio de Sabaneta a la ciudad de Medellín con sus dos hijos.
Fuente: El Tiempo