Mató a golpes al niño de su novia en Florida y trató de culpar de las lesiones al perro
Bobby Frank Curry Jr., de 20 años, fue arrestado en Florida bajo sospecha de haber matado al hijo de 23 meses de su novia, Ezekiel Cotto-Saintfleur, y luego intentar culpar al cachorro de la pareja por las heridas fatales. Las autoridades lo acusan de asesinato en primer grado y abuso infantil agravado por la muerte del niño.
Según el jefe del Departamento de Policía de Lakeland, Sam Taylor, Curry no tenía experiencia previa en el cuidado de niños y aparentemente se sintió abrumado por la responsabilidad de cuidar a Ezekiel.
Taylor comentó que Curry esperó más de dos horas antes de buscar ayuda médica para el niño, lo que describió como “inconcebible e insondable”, según informó Law&Crime.
El incidente ocurrió el 5 de marzo, cuando la policía respondió a una llamada de un niño que no respondía en una casa en Kansas Avenue en Lakeland. Al llegar, los socorristas encontraron a Ezekiel tirado en el suelo del baño. Fue trasladado de urgencia al Centro Médico de Salud Regional de Lakeland y luego al Hospital General de Tampa, donde falleció el 8 de marzo debido a la gravedad de sus heridas.
En una entrevista con la policía, Curry afirmó que estaba cuidando a Ezekiel mientras su novia estaba en el trabajo. Según su relato, mientras bañaba al niño, uno de los cachorros de la casa entró al baño y saltó sobre Ezekiel, haciéndolo caer y golpearse la cabeza. Curry dijo que el niño parecía estar respirando cuando lo acostó en la cama, pero más tarde encontró a Ezekiel sin respirar.
Inconsistencias en la versión
La policía encontró inconsistencias en la versión de Curry y determinó que las lesiones del niño eran inconsistentes con la historia proporcionada, según Law&Crime. Una autopsia reveló que Ezekiel murió por lesiones contundentes en la cabeza y se determinó que fue un homicidio.
“No hay absolutamente ninguna razón. Entiendo que probablemente esté abrumado; hay al menos dos cachorros en la casa, solo tiene 20 años; Entiendo todo eso”, dijo Taylor. Pero el sentido común te lo dirá, y el simple hecho de ser un ser humano te lo dirá, si otro ser humano está en peligro, contestas el teléfono”.
Fuente: El Diario NY