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Le diagnosticaron cáncer terminal, planeó su funeral pensando que podría morir y se terminó recuperando

Tasha Thor-Straten, de 49 años, llevaba poco tiempo de haberse mudado con su marido y los hijos que ambos tienen de relaciones anteriores, cuando de pronto notó que había sangre en sus heces. Sin embargo, en aquel momento no le tomó el peso a la situación, creyendo que se trataba de estrés.

Pero más tarde presentó otros síntomas, como dolor en el estómago y en su espalda. Por este motivo, en la época de Navidad del 2016 decidió acudir a un médico, puesto que la pérdida de sangre ya se estaba haciendo cada vez más evidente, informa Mirror.

Tras una serie de exámenes, la mujer, oriunda de Rochford, Reino Unido, terminó recibiendo una devastadora noticia: «El médico me dijo que tenía cáncer de intestino terminal, se había extendido a mis pulmones y me ofreció cuidados paliativos. Fue absolutamente impactante», afirmó.

La mujer planeó su funeral

Una vez que conoció la terrible noticia, Tasha comentó que «nunca se me ocurrió que mis síntomas pudieran ser cáncer de intestino. Estaba en forma, saludable y cuidé mi dieta, y no había antecedentes de ello en mi familia».

«Descubrir que no solo era cáncer, sino que iba a morir a causa de él, fue casi demasiado para soportarlo», manifestó la afectada, quien asumió que lo más probable es que fallecería a causa de la enfermedad.

Asimismo, comenzó a planificar su funeral y pensó en cómo quería que su círculo cercano se despidiera de ella: «Estaba constantemente anegada en lágrimas y tuve algunas conversaciones muy emotivas con los niños», expresó.

La recuperación

Si bien su cáncer estaba en etapa 3, los médicos aún tenían la esperanza de que la paciente pudiera recuperarse con una delicada cirugía. Y así fue, ya que la operación fue exitosa, por lo que después comenzó con la respectiva quimioterapia.

«Mis efectos secundarios fueron severos, incluyendo cansancio extremo, tristeza, dolor de nervios y una reacción negativa a la luz solar y al frío», señaló.

Por último, Tasha dejó en claro que el tratamiento le trajo diversos cambios a su vida y que actualmente tiene otros hábitos alimenticios: «Ya no puedo digerir la carne roja ni los alimentos procesados. También evito los frijoles, visito regularmente a un homeópata y busco formas de mejorar mi salud intestinal», concluyó.

Fuente: Mega Noticias