INTERNACIONALES

Israel acumula tropas y ordena evacuación del norte de Gaza

Los movimientos de militares aumentaron en los alrededores de Gaza, a la espera de una posible incursión terrestre a gran escala de Israel.

En el enclave, no cesan los bombardeos israelíes y más de un millón de personas recibieron orden de evacuar.

A las 13.00 GMT (16.00 hora local), expiró el último ultimátum del Ejército israelí para que los civiles gazatíes huyeran hacia el sur.

El llamamiento afecta a 1,1 millones de personas -casi la mitad de la población gazatí-, el mayor desplazamiento humano dentro de la Franja de Gaza.

«Estamos desplegados y fuertemente preparados para las próximas etapas de la guerra», afirmó Hagari.

Despliegue de Israel

Israe desplegó al menos 35 batallones en la zona fronteriza con la Franja por el norte, preparados para intensificar la ofensiva.

«Las tropas se están preparando actualmente para implementar una amplia gama de planes operativos ofensivos», informó el Ejército en su último comunicado.

En la desierta ciudad de Sderot, la más próxima a Gaza, reina el silencio, solo interrumpido por el zumbido de los aviones.

La incertidumbre de las alarmas

Las alarmas antiaéreas y las explosiones por intercepciones de cohetes lanzados por las milicias de Gaza han bajado en intensidad en el sur de Israel.

El ultimátum de evacuación a los gazatíes, con plazo hasta las 13 GMT, fue anunciado a primera hora de la mañana con un mensaje en árabe del portavoz militar Avichay Adraee.

“Si te preocupas por ti mismo y por tus seres queridos, ve al sur según las instrucciones”, indicó Adraee, quien garantizó rutas seguras de evacuación.

Sin embargo, la aviación israelí ha atacado con dureza todo el enclave, incluyendo lugares de la mitad sur donde instó a la población a refugiarse, como Rafah, Jan Yunis y Deir al Balah.

Sin embargo, Israel -tanto por medio de portavoces del Ejército como de la Oficina del Primer Ministro- ha responsabilizado a Hamás de la muerte de civiles en Gaza y acusan al grupo de impedir el desplazamiento de la población y usarlos como escudos humanos.

Más de 2.200 gazatíes han muerto en una semana de guerra y más de 8.700 heridos, en un enclave devastado, con apenas agua y comida, y con los hospitales desbordados, sin electricidad ni medicinas; al borde de su peor crisis humanitaria.

Continúan los bombardeos

En los intensos bombardeos, el Ejército israelí informó de que mató a dos altos mandos militares de las Brigadas al Qasam, brazo armado de Hamás: Ali Qadhi, comandante de la unidad Nukhba que dirigió el brutal ataque contra Israel de hace una semana -que ha dejado más de 1.300 muertos, la mayoría civiles y al menos 280 uniformados-; y el jefe de la fuerza aérea del grupo, Murad Abu Murad, también implicado en la planificación de la masacre.

Las tropas israelíes ya acometieron ayer pequeñas incursiones localizadas dentro de Gaza, para «eliminar la amenaza terrorista en el área y localizar rehenes». Medios israelíes informan de que los soldados hallaron cuerpos de rehenes israelíes, pero el Ejército no lo ha confirmado.

Las milicias palestinas de Gaza tienen allí secuestrados a más de un centenar de personas -126 ya identificadas por Israel- desde su brutal agresión del pasado sábado, 7 de octubre, y al menos 26 han muerto a causa de los bombardeos israelíes, nueve hoy mismo -cuatro de ellos extranjeros-, según Hamás.

«Israel está en la primera línea de una guerra contra el mal», afirmó la oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien hoy acudió a visitar a las tropas desplegadas en el sur y se reunió con soldados en los kibutz de Beeri y de Kfar Aza, escenarios de las escenas más cruentas y amargas de la matanza cometida por Hamás.

«Preparaos para lo que viene», les instó Netanyahu, que acto seguido se reunió con todo el aparato de seguridad mientras Israel y Gaza aguardan la siguiente fase de la quinta guerra que les enfrenta desde 2008.

Fuente: Unión Radio