Ganó la lotería y lo mantuvo en secreto para no prestar plata a su familia
¿Le contarías a tu familia que ganaste la lotería? A lo largo de los años se han conocido un centenar de historias donde todos los miembros de la parentada se favorecen de estas ganancias, cumplen sus sueños e incluso fortalecen el vínculo. Sin embargo, no se puede negar de que también hay seres queridos que rompen el diálogo por la avaricia y egoísmo que puede generar el dinero.
De hecho, en relación con el tema de los seres queridos, los especialistas en juegos de azar y quinielas aconsejan tener mucha cautela a la hora de dar a conocer las noticias acerca de los premios, sobre todo si se estaba esperando a la fortuna hace mucho tiempo. De otra manera, el deseado triunfo se puede convertir en una verdadera desgracia que despierte desde envidia, desconfianza y hasta malos entendidos.
Hace pocos días, se conoció que una abuela se quedó con el pozo acumulado de una famosa lotería y dejó a miles de personas sin palabras, ya que al preguntarle “¿Qué haría con su premio?”, ella aseguró que tiene muchos planes individuales para realizar, pero prefiere mantenerlo en secreto para no compartir la ganancia con su familia.
¿Una abuela tacaña o inteligente?
Esta impensada historia, la cual emocionó, pero también generó muchas controversias, tiene como protagonista a una mujer adulta de 87 años, de la que no se dio a conocer el nombre por razones de seguridad, que vive en el condado de Oakland, Michigan, Estados Unidos, y tomó una drástica decisión tras años de juego.
Desde su jubilación, hace poco más de 20 años, todas las semanas se presentó en su agencia de quiniela de confianza para comprar un ticket de “Jumbo Jackpot Slots Fast Cash”, un popular juego de la región. A pesar de que nunca había ganado premios considerados, ella mantenía la plena confianza de que el destino iba a recompensarla después de tantas apuestas, esfuerzos y frustraciones.
El día menos esperado, inmediatamente después de comprar el boleto, lo miró con cautela y vio que los tres símbolos que tenía la boleta eran los relacionados con el premio mayor. «Sabía lo que estaba viendo, pero no lo creía. Le pedí a un amigo que revisara el boleto y confirmó que yo no estaba viendo cosas y ¡realmente gané el premio mayor!», comentó la «Nona».
Con una suma asombrosa de más de 682 mil dólares, esta mujer de 87 años se convirtió en una de las ganadoras más importantes de la lotería local de su condado. A pesar de la enorme alegría, la incredulidad inicial llevó a la ganadora a mantener su victoria en completo secreto durante varias semanas. «Me costó creer que realmente había ganado, así que me lo guardé para mí por un tiempo», confirmó la señora ante los directivos de la quiniela.
Fuente: Crónica