Puerta de vidrio explotó cerca de su cara y quedó con daño cerebral
En 2015 la vida de una joven analista cambio de un segundo a otro, después de que una puerta de vidrio de casi tres metros le explotara encima mientras salía de un edificio.
El incidente no solo provocó el fin de su carrera en el mercado de inversiones, sino que también le causo lesiones cerebrales permanentes.
La víctima es Meghan Brown, una mujer de 36 años, que durante esa época vivía en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, trabajando en la prestigiosa compañía, JP Morgan.
El 2 de febrero de ese año, Brown asistió a una consulta de fisioterapia en Madison Avenue. Cuando se estaba retirando del lugar, la puerta del establecimiento le explotó encima.
“Recuerdo haber visto vidrio en todas partes, en el vestíbulo, cerca de mí” señaló la mujer a la Corte Suprema de Manhattan, de acuerdo indicó el New York Post.
El impactante incidente quedó registrado en video gracias a las cámaras de seguridad del edificio.
NEW: Former-JP Morgan analyst awarded $35 million after a glass door shattered on her in Manhattan.
36-year-old Meghan Brown was leaving a physical therapy appointment in 2015 when the glass door shattered on her.
Brown says the event caused a traumatic brain injury which she… pic.twitter.com/oqtfPfaBBk
— Collin Rugg (@CollinRugg) April 2, 2024
«Caminando hacia una trampa trágica»
Después de casi una década, la corte falló a su favor, otorgándole a Brown una indemnización de más 35 millones de dólares, por daños y perjuicios.
Frente al caso, la mujer denuncio que el incidente le provoco secuelas permanentes, como perder el olfato, el gusto, experimentar vértigo e incluso ser diagnosticada con estrés postraumático.
Además de esto, la despidieron de manera permanente de su trabajo, teniendo que dejar de lado su carrera de analista.
«Claramente, Meghan no tenía ningún aviso de que estaba caminando hacia una trampa trágica», aseguro su abogado, Tom Moore, al medio citado.
«No como el demandado 271 Madison Company, que no implementó un mínimo de cuidados que hubieran evitado que la lesión ocurriera», concluyo el legislador.
En respuesta, los acusados culparon a la mujer y al cambio de temperatura como responsables del quiebre de la puerta.
Actualmente, Meghan reside en Naples, Florida, dirigiendo su propio negocio de helados.
Fuente: Mega Noticias