Desarrollan «biocrudo» para aviones a partir de excrementos humanos
Una compañía británica que busca reducir la huella de carbono de la aviación ha logrado producir combustible no contaminante, denominado ‘combustible de aviación sostenible’ (SAF), a partir de aguas residuales.
Firefly Green Fuels, con sede en Brístol, explica que toma los desechos de las empresas de tratamiento y depuración de aguas y los coloca en un reactor de alta presión, con lo cual obtiene, entre otros, «biocrudo», del que se obtiene —tras un proceso de refinado— una sustancia «casi idéntica al combustible fósil para aviones».
Su director ejecutivo, James Hygate, explica que las heces y demás residuos humanos son una «materia prima barata y abundante» que, además, «nunca se acabará». También, de este modo, se le da uso a este material completamente biogénico que resulta «problemático» en la actualidad.
«Es interesante trabajar con aguas residuales. Por el momento, la única otra vía de eliminación en el Reino Unido es a través del esparcimiento agrícola, una práctica que probablemente será prohibida tan pronto como se encuentre una vía mejor. Nuestro proceso le da a estos residuos un nuevo propósito, creando SAF y al mismo tiempo apoyando la biodiversidad en ecosistemas actualmente plagados de escorrentía agrícola», señala Hygate.
Este biocrudo se asemeja químicamente al queroseno común, pero no contiene carbono fósil. La BBC, que visitó los laboratorios de Firefly Green Fuels, afirma que se trata de un aceite espeso, negro y pegajoso, «que se comporta químicamente como el petróleo crudo».
«Lo que estamos produciendo aquí es un combustible con emisiones netas cero (…) Esto es muy emocionante porque se produjo a partir de una materia prima sostenible, a la que todos contribuimos», cuenta Sergio Lima, director de investigación de la empresa.
Los combustibles no contaminantes aprobados por los reguladores de la aviación mundial hasta ahora no cubren la demanda de la industria. En este contexto, en el que se requieren nuevas vías hacia SAF funcionales, Hygate considera que su solución es «increíblemente eficaz y ecológica» y, al mismo tiempo, promete ser muy rentable. «La opción Firefly muestra potencial para ser la mayor fuente individual de SAF a nivel mundial», dice.
Firefly Green Fuels anunció a comienzos de este mes que la aerolínea europea Wizz Air había invertido 5 millones de libras esterlinas (unos 6,3 millones de dólares) en la compañía. De este modo se espera que sus flotas operen con el nuevo biocombustible dentro del Reino Unido a partir del 2028. Se prevé que Firefly sea certificada bajo el estándar RSB para la verificación de la sostenibilidad de los biomateriales y tenga su primera planta comercial en funcionamiento dentro de los próximos 5 años.
Fuente: RT