Venezolano fue acribillado en Colombia y disidencias de las Farc dejaron impactante mensaje
En un nuevo capítulo de violencia en Colombia, se perpetró el homicidio de un adolescente de 17 años, de ascendencia venezolana. La víctima fue Will Brayan Yanez Díaz, quien era residente del barrio 20 de Julio del municipio de Algeciras, en Huila.
Según el reporte entregado por las autoridades, su cuerpo fue encontrado en la mañana de ayer en la vereda Las Damas, a un costado de la vía terciaria que conduce del casco urbano a la zona sur de la región.
De acuerdo con las primeras indagaciones, el homicidio se habría registrado en horas de la madrugada por la rigidez en la que fue hallado el cadáver. En el lugar estaban las vainillas de los disparos con los que, al parecer, le habrían quitado la vida.
Durante el proceso del levantamiento, los peritos forenses pudieron constatar que Yanez Díaz, recibió al menos seis disparos que le costaron su existencia de manera instantánea. Todos los proyectiles los recibió a la altura de su cabeza y tórax.
Lo que hasta ahora ha llamado la atención de las autoridades fue el escrito que dejaron los verdugos, en el que atribuyeron el suceso a las Farc. Cabe precisar que en esta zona de Algeciras tiene amplia injerencia el GAO-r ‘Segunda Marquetalia’.
Por lo pronto se están adelantando las averiguaciones correspondientes para verificar la veracidad del panfleto que textualmente decía “se justició por jíbaro Att. Farc Ep”. Este escrito fue dejado cerca de los despojos mortales de Will Brayan.
Cabe precisar que durante la inspección y demás actividades de rigor que adelantaron las unidades de criminalística, se confirmó que el hoy occiso no presentaba anotaciones en el sistema SPOA de la Policía Nacional en el territorio colombiano.
El hecho de sicariato toma como hipótesis un posible caso de ajuste ilegal de cuentas. Ahora la Sijín tiene de tarea establecer los móviles del homicidio para dar con el paradero de los responsables. La investigación es todo un reto debido a que el sitio es una zona rural completamente despoblada, donde no hubo testigos, ni cámaras de seguridad que revelen la identidad de los verdugos.
Fuente: Alerta Tolima