Zelensky sobrevivió a “más de una docena” de intentos de asesinato a cargo de mercenarios rusos
“Me quedo en Kiev. En mi oficina. No me escondo y no le tengo miedo a nadie”, aseguró el lunes pasado el presidente ucraniano Volodimir Zelensky, en plena invasión rusa. El mandatario desafió a las tropas de Vladimir Putin, incluso pese a los reportes de que sobrevivió a “más de una docena” de intentos de asesinato a cargo de reclutas rusos.
Mikhail Podolyak, jefe de la oficina del presidente ucraniano, alertó sobre la existencia de “grupos de sabotaje” rusos que entran a Kiev con el objetivo de asesinar a Zelensky y su familia.
En declaraciones al portal Pravda.com, el asesor de Zelensky indicó que “una red muy poderosa de inteligencia y contrainteligencia” logró frustrar los intentos de atentado perpetrados por los reclutas rusos, que fueron abatidos antes de llegar al presidente de Ucrania.
Podolyak sostuvo que los servicios de inteligencia occidentales tenían razón al alertar que Zelensky era el “objetivo número uno” de Putin, pero aclaró que la cifra de intentos de asesinato reportada por Occidente es muy inferior a la real: “Nuestros socios extranjeros hablan de dos o tres intentos. Yo creo que hubo más de una docena”.
Según indicó, la oficina del presidente está en constante seguimiento de los grupos de sabotaje que pretenden ingresar en el barrio gubernamental. Sin embargo, éstos son localizados por las agencias de inteligencia y abatidos antes de alcanzar su objetivo.
La semana pasada se informó que Zelensky había sobrevivido a tres atentados contra su vida después de que mercenarios del Grupo Wagner, apoyado por el Kremlin, y las fuerzas especiales chechenas fueran enviados a Kiev para asesinar al presidente ucraniano.
De acuerdo a lo informado por The Times, los atentados fueron frustrados por miembros subversivos contra la guerra dentro del Servicio Federal de Seguridad (FSB) de Rusia, quienes alertaron a las autoridades ucranianas.
El Secretario de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania, Oleksiy Danilov, confirmó los tres intentos de asesinato y declaró a la prensa local que había recibido información de los agentes dobles “que no quieren participar en esta sangrienta guerra”.
“Gracias a esto, el grupo de elite Kadyrov fue destruido, tras haber venido a eliminar a nuestro presidente”, agregó.
Uno de los grupos que intentó asesinar a Zelensky, de 44 años, fue el Grupo Wagner, que cuenta con 400 miembros ubicados en Kiev. Los mercenarios se infiltraron en la capital ucraniana con una lista de 24 nombres a dar de baja. La principal misión era asesinar al líder nacional para lograr derrocar a su gobierno y colocar uno que sea controlado por Moscú.
La lista de objetivos incluía también al primer ministro de Ucrania, a todo el gabinete, al alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, y a su hermano, Wladimir.
Los mercenarios del grupo Wagner no tenían constancia de los intentos llevados a cabo por asesinos chechenos, pero ese grupo lleva más de seis semanas en Kiev, vigilando las actividades de 24 objetivos ucranianos de alto perfil. Según The Times, a ese grupo se le instruyó para que aguardara la llegada de las fuerzas especiales rusas Spetsnaz, para que les proporcionara un corredor seguro para salir de Kiev una vez se completara el asesinato.
No obstante, el plan fue saboteado tras llegar a las altas esferas del gobierno ucraniano el pasado sábado por la mañana, lo que llevó a Kiev a declarar un toque de queda duro de 36 horas.
Una fuente con conocimiento de las actividades del Grupo Wagner dijo a The Times que entre 2.000 y 4.000 mercenarios rusos habían llegado a Ucrania en enero, pero con diferentes misiones.
De acuerdo a los reportes, los reclutas seguían a Zelensky y a su gabinete a través de sus teléfonos móviles. Sin embargo, una fuente del grupo mercenario reconoció al medio británico que fue “intrigante” lo bien informado que parece estar el equipo de seguridad que protege a Zelensky.
Fuente: Infobae