INTERNACIONALES

Venezolanos expulsados de EE. UU. duermen en calles de Ciudad Juárez

Los albergues para migrantes en Ciudad Juárez, México, están saturados. Esto ha obligado a los venezolanos a dormir en la calle, sobre cartones acomodados en el suelo, en bancas públicas o bajo las escaleras que dan acceso al Centro de Atención Integral al Migrante (CAIM), que opera el Consejo Estatal de Población.

Esta es la situación que viven decenas de migrantes venezolanos que fueron expulsados por Estados Unidos tras las nuevas medidas del plan migratorio.

Una nota del medio local La Verdad publicada este sábado, 15 de octubre, detalla que algunos migrantes usan sus morrales y chaquetas como cobijas para no acostarse en el piso frio, pues la región está en época de otoño.

Más de 600 venezolanos retornaron a Ciudad Juárez desde el 12 de octubre, cuando los gobiernos de Estados Unidos y México anunciaron nuevas medidas para reducir el flujo migratorio de personas procedentes de Venezuela.

El Consejo Estatal de Población está ubicado al lado del puente internacional Paso del Norte y a metros del puerto de entrada por el que fueron retornados desde El Paso, Texas, unas 40 personas que permanecen a la intemperie.

Testimonios

“Dormir en el suelo ya se está volviendo una costumbre para nosotros”, dijo Segundo, unos de los venezolanos que pernoctó a las afueras de las oficinas estatales. Durante su trayectos por Centroamérica y México también llegó a dormir en campamentos improvisados, pero describió que las peores noches las vivió en la Selva de Darién.

Otros de los migrantes reportaron que en la ciudad han dormido en edificios religiosos o espacios que migrantes de origen haitiano les compartieron temporalmente.

Karla, migrante venezolana de 33 años, narró que después de que las autoridades estadounidenses la expulsaron, ella y un grupo de migrantes se aceraron al CAIM donde recibieron ropa nueva, comida, agua y pudieron usar el baño en las instalaciones. Sin embargo, les informaron que no había lugar en los espacios de acogida, por lo que debían buscar por su cuenta habitaciones disponibles en hoteles.

¿A qué se exponen?

El texto de La Verdad también destaca que Juárez una de las ciudades más peligrosas de México. Por ello, las personas expulsadas desde Estados Unidos están expuesta a secuestros, extorsiones y amenazas del crimen organizado, como lo han documentado organizaciones defensoras de los derechos de migrantes.

Los migrantes se movilizan en grupos por protección y no saben a donde acudir por ayuda porque no conocen la ciudad.

El viernes en la noche, el Grupo Chévere, compuesto por venezolanos refugiados en la ciudad y voluntarios, llevó cajas con pizza para ofrecer como de cena a sus connacionales que permanecen en la vía pública, luego de su retorno de El Paso, Texas.

Hasta ahora el gobierno de Chihuahua no ha fijado una postura ante la nueva crisis humanitaria desatada en esta frontera por el cambio de políticas migratorias de Estados Unidos. El Gobierno de México solo dio a conocer que aceptaba a los migrantes, sin mencionar algún programa de ayuda especial para atender la nueva contingencia.

Fuente: El Pitazo